Unos y otros en el escenario electoral de Coahuila 2011

“Quien quebranta el sentido y rumbo de su pasado, no sólo pierde su presente, ya que al claudicar en sus convicciones, cancela el contenido de su futuro. La fuerza social del pueblo jamás se negocia”.

Luis Fernando Hernández González
Para muchos ciudadanos coahuilenses que habrán de concurrir a las urnas el próximo mes de julio, la elección de gobernador está más que definida, toda vez que los candidatos observados para la contienda han estado actuando durante su ejercicio público bajo esquemas y contextos diferentes, mostrando con ello, los matices y estrategias que dan sentido a sus compromisos frente a la sociedad que buscan ahora representar.

Los partidos políticos y sus actores desa- rrollan lo mejor de sus estrategias, buscando, como ya lo sabemos, llegar con sus mejores destrezas de impacto para la conquista de voluntades electorales de los ciudadanos que les sean afines a sus propósitos, para de esta forma triunfar en la contienda sea ésta para gobernador o bien para diputados locales al Congreso Estatal.

Surgen en el trascurso del propio calendario electoral del IEPC las mediciones metodológicas, publicitarias y financieras de los montos de recursos presupuestados para cada una de las etapas y actividades, ya sean éstas de divulgación partidaria o en aquellas necesarias y propias que den sentido a la competencia interna de los partidos; esto se da cuando existen varios aspirantes por un mismo partido a un puesto de elección popular. Algunos pasándose de vivos aprovechan la apertura publicitaria y la simulación de contendien- tes para hacer uso de marrullerías como ya el partido banquiazul lo hizo con sus aspirantes a la gubernatura mostrando una actitud simulada, perniciosa y falaz ante sus propios militantes.

Unos aspirantes se inspiran en utilizar esta contienda para acrecentar la cultura democrática del estado, auspiciando la participación popular y la corresponsabilidad social, bajo el entendimiento de elevar a Coahuila hacia planos superiores en su nivel de vida, aunados por supuesto a esquemas de formación socio-económica de sus hombres y mujeres en el contexto personal y su entorno de desarrollo.

Otros más basan sus patrones de interés, sustentados en la búsqueda del poder por el poder, asumiendo actitudes obsesivas e intransigentes, sin consultar su pasado que les es adverso y les cuestiona, son éstos los que buscan sorprender bajo un discurso de la moral y la honestidad, escondiendo sus engaños para hacer presa a la gente de Coahuila bajo publicaciones inisidiosas.

Cada uno de los precandidatos tiene su distintivo propio en donde ha configurando años atrás su hechura y con ello sus cualidades de fuerza, fortaleza, sensibilidad, organización y congruencia de su quehacer frente a la población, o bien dentro de lo que comúnmente llamamos arena política.

Unos estuvieron en contacto con sus representados, gestionaron, defendieron, legislaron y asumieron sus tareas para buscar construir un mejor y superior sentido de la vida dentro de la sociedad.

Otros, por el contrario, se apartaron, se encapsularon, se alejaron de los problemas y necesidades y del sentir de la gente, configuraron su esquema de hacer política con los grupos distantes de Coahuila, conformado por camarillas y negocios al amparo del poder, su vida cotidiana y real trascurrió distante alejada de esas complicaciones que en la población se dan en la vida diaria con sus angustias, carencias y necesidades.

Unos dieron carácter institucional a sus trabajos y tareas, al proyectar con claridad sus tiempos, objetivos y anhelos, definieron con oportunidad sus propuestas al poner al servicio de la población y de la entidad su compromiso y responsabilidad, percibieron puntualmente que en política no hay, ni existen tiempos y espacios vacíos, se abocaron con ahínco a la materialización de los proyectos que demandaba la población ante las circunstancias críticas actuales.

Otros por el contrario rehuyeron a sus comisiones expresadas y dictadas por el pueblo, se apartaron dando la espalda a Coahuila cuando más se les requería, lo vimos en Pasta de Conchos y en Celemania, en el tornado de Piedras Negras y en las inundaciones de Parras y Ramos Arizpe, en la inseguridad de Torreón, en los efectos de desastre del Huracán Alex, lo mismo que ante la crisis económica y el desempleo de años atrás que afectó y percibe la secuelas aún la población trabajadora del estado y la misma que sufre la carestía en este tiempo; poco o nada tiene que ofrecer para sus aspiraciones populares este tipo de personas, más que acudir a su simulada preocupación y doble moral, pues ahora ante lo evidente e irrefutable de su ausencia, el pueblo de Coahuila sabrá ponerlos en el sitio que merecen.

Unos solicitan con mesura el voto que les respalde en esta contienda electoral para salir victoriosos; otros, disimulan su desvergüenza y exhiben su cinismo al acudir ante la gente solicitando su apoyo que les otorgue confianza.

La contienda electoral en Coahuila ya está escrita… a la fuerza de la alianza ciudadana por el progreso nada la vence.